Una vez en el hospital, pudimos comprobar que este individuo habías sido disparado, puesto que en las radiografías se evidenciaba la presencia de diversos perdigones. Como consecuencia, tenía una fractura en la zona distal del cúbito izquierdo, heridas en el oído derecho y alteraciones en ambos ojos.

Después de permanecer en tratamiento durante más de un mes, en el que se le trató la fractura que presentaba y las alteraciones oculares, y pasar por el departamento de rehabilitación, recuperó por completo la movilidad del ala afectada y se pudo comprobar que, finalmente, había recuperado la visión.

La historia de ”Lucas” tuvo su final feliz cuando fue por fin liberado el pasado día 14 de marzo por nuestro amigo Lucas acompañado de su familia y amigos.
¡Muchas gracias por acompañarnos en esta liberación!