Esta pieza se halla en el Museo Iziko de Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y la reproducción y tratamiento de su imagen en tres dimensiones ha permitido detectar en el interior del ave una cola de ratón doméstico y otros restos de roedores y aves, lo que sugiere que la rapaz había sido objeto de alimentación artificial. Las conclusiones del estudio han sido publicadas en Journal of Archaeological Science. La revista científica on-line Science Daily nos ofrece más información al respecto:
http://www.sciencedaily.com/releases/2015/09/150903081757.htm