Estampa de una de las águilas reales del centro de recuperación de animales silvestres de GREFA.. Autor: Antón Cobas
Estampa de una de las águilas reales del centro de recuperación de animales silvestres de GREFA.. Autor: Antón Cobas

Puede que suene algo paradójico, pero a un águila real que fue víctima de un disparo la salvaron la vida unos cazadores. Fueron ellos los que la llevaron a la Guardia Civil después de hallarla malherida en un coto de Santorcaz (Madrid) a finales de 2011. Medio año después, fueron ellos mismos, convertido en orgullosos “padrinos” de este animal, los que la devolvían sana y salva al medio natural. Tras haber contribuido mediante una campaña de apadrinamiento a costear su rehabilitación, tuvieron la oportunidad de soltarla en el mismo coto donde se la habían encontrado. Con su gesto nos demostraron que ese perfil de cazador que respeta las especies protegidas y contribuye a conservar la biodiversidad no tendría por qué ser una autopía y debería abundar más en un colectivo a menudo desacreditado por escopeteros y envenenadores.

El águila real es un macho adulto, se llama Borges y, tras meses de tratamientos y cuidados en el hospital de fauna silvestre de GREFA, actualmente vuela libre. Cuando ingresó, tenía un ala rota y perdigones por todo el cuerpo y la cabeza, algunos incluso alojados en zonas de riesgo, como por ejemplo cerca de un ojo. Pero el animal respondió bien al largo proceso de rehabilitación y llegó un día de junio de 2012 en el que pudo ser liberado con grandes expectativas por parte de sus cuidadores de que saldría adelante por sí mismo en la naturaleza. Más de un año después, nos encontramos a Borges asentado en un amplio territorio del sector oriental de la Comunidad de Madrid.

Gracias a los datos aportados por el emisor GPS en que va acoplado a su dorso, sabemos que los dominios de Borges se extienden desde Guadalajara, al norte, hasta Aranjuez, al sur, coincidiendo más o menos con el valle del río Jarama. La distancia máxima entre las casi  1.300 localizaciones GPS del ave hechas en 2013 ha sido de unos 120 kilómetros y la distancia que ha recorrido a diario ha sido de una media de algo más de veinte kilómetros.

Creemos que Borges no ha formado pareja ni se ha logrado reproducir, quizás condicionado por el hecho de ser un animal de bastate edad, seguramente por encima de los diez años. Pero su caso es un ejemplo de la importancia de la labor que se hace desde los centros de recuperación de fauna silvestre. El seguimiento de Borges está además aportando información de gran valor científico a la hora de diseñar protocolos de actuación en lo que se refiere a la reintroducción en la naturaleza de las grandes rapaces que entran con lesiones o patologías en dichos centros.

Pero no todos los animales que ingresan en las instalaciones de GREFA pueden ser rehabilitados con garantías suficientes para su liberación y, puesto que de águilas reales hablamos, a varios ejemplares irrecuperables para la vida en libertad el destino les tenía reservada una importante misión dentro del recinto en el que viven: servir de reproductores para un proyecto de cría en cautividad de la especie que está permitiendo el nacimiento de cuatro o cinco pollos al año, aves que serán reintroducidas en la naturaleza para reforzar las poblaciones silvestres.

Fernando Garcés, secretario general de GREFA, se dispone a liberar al águila real Borges en Santorcaz (Madrid), con la colaboración de algunos cazadores.Fernando Garcés, secretario general de GREFA, se dispone a liberar al águila real Borges en Santorcaz (Madrid), con la colaboración de algunos cazadores.

Primeros avances en el noroeste ibérico

No es que el águila real sea la rapaz más amenazada de la fauna ibérica, pero sí que es víctima de la mayoría de los problemas de conservación que afecta a este grupo de aves, como disparos, expolio de nidos, electrocuciones, cebos envenenados y todo tipo de molestias humanas en sus hábitats de cría. No debe extrañar por eso que en algunas zonas las poblaciones de esta especie no atraviesen su mejor momento, como es el caso de Galicia, donde está catalogada como  “En peligro de extinción”.

En los últimos años, gracias a la iniciativa de GREFA, casi veinte águilas reales se han reintroducido en el Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés (Ourense), con la colaboración de la Xunta de Galicia, con excelentes resultados y una influencia positiva sobre la especie que empieza a notarse no sólo en sus territorios gallegos, sino también en otros cercanos del ámbito del noroeste ibérico, en Portugal, Asturias y Castilla y León.

DE CUENCA A OURENSE: El próximo hito del proyecto de reintroducción del águila real en Galicia será la suelta este mismo año, en el Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés (Ourense), de un águila real procedente del centro de recuperación “El Ardal”, en Albendea (Cuenca), cedido a GREFA por la Junta de Castilla-La Mancha. Le deseamos toda la suerte del mundo.  

Más información sobre el proyecto de reintroducción del águila real en Ourense

Momento de la suelta de Eufemia, una de las águilas reales reintroducidas en el Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés (Ourense).. Autor: Jesús RegalMomento de la suelta de Eufemia, una de las águilas reales reintroducidas en el Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés (Ourense).. Autor: Jesús Regal

Más información sobre el águila real

1. Monografía de SEO/BirdLife 
2. Atlas de las Aves Reproductoras de España