La reunión contó además con representantes de numerosas Juntas Agropecuarias Locales de la comarca vitivinícola de Toro y del sindicato COAG, que coincidieron de forma unánime en la oposición total al uso del rodenticida como medida de control del roedor. Así mismo, mostraron un significativo interés en nuestro proyecto, basado en la recuperación de las poblaciones de rapaces depredadoras de topillos, e incluso en desarrollarlo en parcelas vitivinícolas de la comarca.

No podemos ocultar nuestra alegría por tal muestra de apoyo colectivo entre el sector vitivinícola de Toro, que esperamos pronto pueda materializarse en acciones concretas de control biológico, como ya estamos llevando a cabo desde hace varios años en otras comarcas agrícolas de Castilla y León.