Un desastre. No se necesitan más palabras para describir lo ocurrido en Navalcarnero. En tan solo tres años GREFA había logrado consolidar una gran colonia de cernícalo primilla en los niveles superiores del colosal silo agrícola existente en este término municipal, donde la especie había llegado a desaparecer años atrás. El crecimiento de la colonia ha sido exponencial desde 2012, llegando en el año 2014 a las 32 parejas, cuyos pollos han sido anillados año tras años por nuestro equipo. Solo una colonia de la especie en la Comunidad de Madrid, la del castillo de Torrejón de Velasco, tenía más parejas.

En 2014, uno de los robos ocurrió en el momento en el que 40 pollos criados en cautividad en GREFA e introducidos en el silo se encontraban a punto de volar. Las personas que accedieron al silo tiraron los hackings y provocaron la desaparición de 12 pollos y lesiones a un ejemplar, que quedó irrecuperable. Casualmente, dos de los pollos desaparecidos ingresaron mansos en nuestro centro un par de meses después, un síntoma claro de haber permanecido en cautividad, por lo que no pudieron ser ya liberados.

Una imagen desoladora

El penúltimo robo ocurrió hace apenas un mes. Y hace muy poco, el pasado 6 de mayo, reventaron por enésima vez la puerta del silo, accediendo a él para arrasar con lo que quedaba: pesadas planchas de hierro que se llevaron tirándolas desde las ventanas de la séptima planta.

Al acceder al silo de Navalcarnero tienes la sensación de introducirte en el edificio de una ciudad en estado de sitio. Puertas y ventanas arrancadas, oficinas destruidas, paredes reventadas y restos de equipos tirados dentro y en el exterior. En la citada séptima planta, donde se encuentran instalados parte de los nidales, nos encontramos con que una decena de ellos habían sido abiertos en pleno inicio del periodo de incubación. En la octava planta, dos de los hackings estaban rotos y las ventanas que dan acceso a los nidales abiertas.

Por lo demás, ni un rastro de huevos y apenas unos pocos cernícalos sobrevolando el silo. Suponemos que el enorme estruendo causado por el impacto de las planchas de hierro lanzadas desde tanta altura, y el posible expolio de los nidos, ha sido causa suficiente para ahuyentar a las parejas que habían retornado desde África este año.

¿Quién protege al cernícalo primilla?

Estamos asistiendo atónitos a cómo se desvalijan impunemente silos como el de Navalcarnero y a la desidia de los que tienen las competencias en la protección de una especie catalogada como “En Peligro de Extinción” en la Comunidad de Madrid. Nadie ha respondido a las tres denuncias interpuestas en un solo año.y aún seguimos esperando a saber de qué manera se va a afrontar la destrucción de esta colonia. A río revuelto ganancia de pescadores, por lo que siempre alguien se alegrará por lo que está sucediendo.

La recuperación del cernícalo primilla en Navalcarnero ha sido posible gracias a las medidas acometidas dentro de nuestro proyecto “Corredores para el primilla. Generando biodiversidad”. Estas acciones han consistido principalmente en la colocación de nidales, la puesta a punto de métodos de fijación de las aves con reclamos vivos y señuelos y. por supuesto, la liberación mediante hacking de pollos nacidos en nuestras instalaciones de cría en cautividad. Gracias a este proyecto iniciado hace más de 10 años, GREFA ha intervenido en cerca de 50 silos y ha construido 9 primillares, consiguiendo así generar 19 nuevas colonias de cernícalo primilla en cinco comunidades autónomas.

Este es un momento clave para la colonia de Navalcarnero. Si continúan los robos, la temporada reproductora de 2015 estará perdida para muchas parejas, algunas de las cuales quizás no retornen jamás a su colonia, por lo que el esfuerzo habrá sido en vano. El año pasado propusimos al Fondo Español de Garantía Agraria, propietario actual del silo, la colocación de una puerta blindada en la planta siete para intentar evitar que accedan a las zonas con nidales.

Si logramos que de una vez por todas se controlen las continuas molestias en el silo, quizás los primillas de Navalcarnero intenten hacer puestas de reposición y criar con éxito esta temporada, salvando así la segunda mayor colonia de la Comunidad de Madrid.

El silo de Navalcarnero en 2014