Como todos los años, el mes de julio representa el punto de inflexión en cuanto a ingresos de animales en nuestro centro. En su mayoría se trata de pollos y crías que han abandonado sus nidos y madrigueras o bien han sufrido algún accidente quedando huérfanos y no pudiendo recibir el cuidado de los padres hasta completar su correcto desarrollo. Y es precisamente julio el mes en que se junta el mayor número de casos de pollos volantones, pollos caídos del nido, abandono de los padres etc.

Ante el gran número de recepciones que debe llevar a cabo GREFA en los meses de verano, y julio en mayor medida, este año hemos podido tener la gran suerte de contar con un gran equipo de voluntarios que han apoyado en las labores de recepción de animales en el centro, y la atención de llamadas llevando también a cabo una importante labor de asesoría ante los problemas planteados en las llamadas. Desde aquí, aprovechamos para darles las gracias a todos ellos por el esfuerzo empleado.