Un Agente Mediambiental de Castilla y León toma muestras de suelo junto a los restos del buitre negro hallado en Neila (Burgos).Un Agente Mediambiental de Castilla y León toma muestras de suelo junto a los restos del buitre negro hallado en Neila (Burgos).La colaboración ciudadana es imprescindible en el control de las amenazas y la mortalidad en el medio donde tratamos de recuperar la población extinta de buitre negro en la Sierra de la Demanda. Buen ejemplo de ello es el reciente hallazgo por parte de un vecino de Huerta de Arriba (Burgos) de los restos de un ejemplar de esta especie. A medida que nuestro proyecto avanza, estamos seguros que irá a más la importancia de la información aportada por los habitantes de la zona donde trabajamos.

Vecinos de los municipios del entorno de reintroducción vienen notificando al equipo del Proyecto Monachus las observaciones de buitres negros así como el hallazgo de animales muertos por electrocución o, como en este caso, los restos del cadáver de un ejemplar. En efecto, el pasado 13 de abril, un vecino de Huerta de Arriba que se encontraba paseando por el monte encontraba los restos óseos y algunas plumas de lo que correctamente identificó como un buitre negro. Así nos lo notificaba ese mismo día, llevándonos hasta el lugar del hallazgo, ubicado en el término municipal de Neila (Burgos).

Allí mismo sobre el terreno comprobamos que, efectivamente, se trataba de un ejemplar que por el plumaje podría ser un joven nacido en 2018, si bien la escasez de restos dificultaba su identificación. El animal había muerto en unos prados de montaña y sus restos presentaban aún fauna invertebrada cadavérica, por lo que se trataba de una muerte relativamente reciente. Aunque no se trata de uno de los buitres negros liberados por nuestro proyecto de reintroducción, la aparición de una cadáver de esta especie amenazada no es una buena noticia. Agentes Medioambientales de la Junta de Castilla y León procedieron al día siguiente al levantamiento de los restos, que fueron trasladados al Centro de Recuperación de Animales Salvajes (CRAS) de Burgos, a fin de determinar las causas de la muerte del animal.

Otras personas de la zona nos han dado aviso por electrocuciones de buitres leonados, ayudándonos a identificar los apoyos peligrosos, los cuales ya han sido corregidos a día de hoy. Y hay más ejemplos: a mediados de 2018, un ganadero de otra comarca nos avisaba del hallazgo del cadáver de otro buitre negro encontrado bajo un apoyo eléctrico.

Restos del buitre negro hallado en Neila por un vecino de la zona.Restos del buitre negro hallado en Neila por un vecino de la zona.

Más observaciones y rescates

La implantación del Proyecto Monachus ha disparado la presencia de buitres negros tanto en Burgos como en La Rioja, al suponer un fuerte reclamo para los ejemplares divagantes de esta especie. Este hecho se ha traducido en un número mayor de observaciones, así como en el rescate de un mayor número de buitres negros en la provincia. En 2018 fueron rescatados dos ejemplares desnutridos, los cuales se han recuperado en el CRAS de Burgos y en estos momentos se encuentran en la jaula de aclimatación del proyecto, en la propia zona de reintroducción de la Sierra de la Demanda, junto con otros buitres negros, y serán liberados en octubre.

La causa más común de mortalidad en el buitre negro, sobre todo en jóvenes, es la desnutrición, y es probable que el ejemplar encontrado en Neila pueda haber perecido por dicha causa, si bien estamos a la espera de los resultados. Desde GREFA y el equipo del Proyecto Monachus agradecemos enormemente la colaboración ciudadana así como la eficacia de los Agentes Medioambientales en la retirada del cadáver.

Dos Agentes Medioambientales de Castilla y León recogen los restos del buitre negro hallado en Neila.Dos Agentes Medioambientales de Castilla y León recogen los restos del buitre negro hallado en Neila.