Pessonada, buitre negro, autor: Marc Galvez¿Hay vida después de la muerte?
Pues parece ser que sí. Y muy buena.
Al menos es lo que acaba de mostrar ORIOL, de manera irrefutable.
En la anterior noticia sobre la repentina muerte de su pareja, NEUS, afirmé que este macho tiene algo que hechiza a las hembras de la colonia. Y que, gracias ese don, no tardaría en emparejarse de nuevo.

¡Jamás imaginé que le bastarían 24 horas!

Resulta que el domingo 1 de diciembre, a mediodía, divisé una pareja de buitres negros ocupando el nido de NEUS y ORIOL, con grandes muestras de cariño mutuo. Y  mi sorpresa fue aun mayor cuando consumaron su relación con una larga cópula.

La distancia era mucha, no lograba leer las anillas con el telescopio. Pero, tras descartar otras opciones, deduje que la pareja eran…. ¡¡¡ORIOL y PESSONADA!!!

Neus, buitre negro, autor: Marc GalvezRecordemos que PESSONADA perdió a su pareja, HORTÒ, hace dos años. Y desde entonces andaba buscando una nueva oportunidad, sin éxito ante la falta de machos adultos y solteros en la colonia. Se da además la circunstancia de que este nido ya lo habían regentado una temporada ella y HORTÔ en 2010, así que en realidad estaba regresando a casa.

De una manera tan inesperada, la historia de estos buitres negros pierde su amargor inicial dejándonos un regusto muy dulce. Puesto que el emparejamiento de dos ejemplares viudos, adultos y con mucha experiencia es el mejor regalo posible, tanto para ellos como para la colonia de Boumort-Alinyà. Y, por supuesto, para todo el equipo del proyecto de reintroducción.

P.S. Hoy lunes, 2 de diciembre, tras el desayuno, la pareja de “tortolitos” se ha pasado la mañana entera acariciándose entre sí, tan felices como si nada malo hubiera ocurrido en sus vidas.

Mario Álvarez Keller
Equipo de Boumort-Alinyà