Casualmente los últimos animales apadrinados que liberamos en 2016 fueron también un buitre leonado y un cernícalo vulgar. Y casualmente fue un precioso regalo de otro querido padrino, Sergio, que sorprendió a su padre con el apadrinamiento del buitre leonado, bautizado con su apellido “Urbón”, y a su hermana, que liberó el pequeño pero fiero cernícalo vulgar.

Daniela abre el transportín para que el buitre leonado “Leo” sea libre.Daniela abre el transportín para que el buitre leonado “Leo” sea libre. Mª Eugenia con “Alex” un macho de cernícalo vulgar ya recuperado y a punto de ser liberado.Mª Eugenia con “Alex” un macho de cernícalo vulgar ya recuperado y a punto de ser liberado.

Un detalle más. Los dos buitres leonados apadrinados y liberados de los que os hemos hablado eran jóvenes del año, que ingresaron en nuestro Hospital de Fauna Salvaje entre los pasados meses de septiembre y octubre muy delgados y deshidratados, así como con altos niveles de plomo. Como ya os hemos contado en otras ocasiones, desgraciada tónica de los últimos meses del año. Todo un lujo contar con estos padrinos que les han ayudado a volver a su hábitat. ¡Muchas gracias!