15-29 de enero 2019
BIRDWATCHING SPAIN (http://www.birdwatchingspain.net)
VIAJE ORNITOLÓGICO A SRI LANKA POR BIRDWATCHING SPAIN
Día 1. Madrid-Colombo
Después de un largo viaje llegamos al aeropuerto de Colombo desde donde nos llevan al hotel en Veyangoda. Cenamos todos juntos y hablamos sobre el plan del próximo día ¡Comienza nuestra aventura por Sri Lanka!
Día 2. Anawilundawa-Anuradhapura
Desayunamos a las 6 de la mañana y poco antes de las 7 damos un pequeño paseo por los jardines del hotel observando el Pito malabar, el Drongo ventriblanco, el Alción de esmirnia y la Oropéndola encapuchada entre otras aves.
Sobre las 7:20 salimos en dirección al humedal de Anawilundawa. Pasamos un par de horas en esta zona Ramsar observando aves desde una pista de tierra. Vemos especies típicas de humedales como el Suiriri de Java, la Garcilla india, el Tántalo indio o el Ibis Sagrado. Disfrutamos también de espectaculares mariposas y libélulas como la Rhyothemis variegated. Vemos adultos e inmaduros de Milanos de Braham, así como varios ejemplares de la imponente Picotenaza asiático. Otras especies observadas incluyen la Carraca India y el Águila chila, una de las rapaces más comunes en el subcontinente asiático.
Posteriormente continuamos nuestro itinerario, haciendo una parada junto a la playa en restaurante para tomar café. Todavía de nota el cansancio del largo viaje. Tras el café, pasamos media hora por los alrededores viendo el llamativo Abejaruco coliazul y el Abejaruco esmeralda. En un herbazal próximos, observamos el Alcaudón pardo y varias Bisbitas orientales. Por la orilla pasa volando el Charrán piquigualdo, una especie de charrán de gran tamaño y pico amarillento. Continuamos el itinerario en el autobús hasta el restaurante donde paramos a comer. Aquí la comida es un poco más “picante” de lo normal, dando lugar a situaciones graciosas. ¡Más de uno sudamos durante la comida! Posteriormente continuamos con el viaje hacia el hotel, parando en unas lagunas junto a la carretera. Allí vemos a el Artamo ceniciento y el Timalí ojigualdo entre otras especies.
Nuestra última parada del día es en el templo budista de Anuradhapura. Durante un paseo por los alrededores, vemos al endémico Calao grís cingales y hasta 10 ejemplares del impresionante Calao coronado.
Día 3 Wilpattu (Crónica del viaje ornitológico a Sri Lanka)
Hoy toca madrugar, y cuando digo madrugar, significa salir a las 5 de la mañana. Después de tomar un café rápido y tras una hora de recorrido llegamos a la entrada del Parque Nacional de Wilpattu. Aquí pasaremos todo el día, buscando aves y mamíferos entre los bosques y los más de 60 lagos que conforman el parque. Nos dividimos en 2 Toyotas de 6 plazas y mientras esperamos en la entrada a que nos den acceso al parque, vemos al espectacular Monarca colilargo asiático. Junto a las lagunas vemos numerosas aves limícolas como la Avefría india, el Chorlitejo mongol chico, el Archibebe fino y claro, así como las 3 especies de Andarríos, grande, bastardo y chico. En la orilla descansa un Cocodrilo de las marismas (Crocodylus palustris). No está permitido bajar del vehículo durante el recorrido, excepto en una zona habilitada. Hay tanta diversidad de aves y mamíferos que nos está costando más tiempo del previsto llegar a la zona de descanso. Mientras comemos, disfrutamos de los confiados Macacos de Sri Lanka que se aproximan poco a poco a nosotros con una única intención, ¡quitarnos la comida!!! También vemos langures.
Sobre las 2 del mediodía salimos de nuevo con los vehículos, y tenemos una fugaz observación de Oso labiado.
Por la tarde continuamos el recorrido por el parque y observamos en un lago un imponente macho de Elefante asiático alimentándose de la hierba que sobresale del agua. Otros
interesantes mamíferos observados son el Búfalo salvaje, así como el Ciervo moteado y el Muntiaco de la india. En un árbol posada a pocos metros del vehículo disfrutamos de una espectacular Águila azor variable que fotografiamos a placer. El ave nacional de Sri Lanka, el colorido Gallo de Ceilán es una especie muy común en el parque.
Día 4. Wilpattu-Sigiriya
Hoy por la mañana repetimos safari por lo que madrugamos de nuevo para estar en Wilpattu a las 6 de la mañana. Mientras hacemos la cola para entrar al parque vemos en los árboles de alrededor al endémico Ceniciento de Ceilán, al Minivet chico y el Oruguero cabecinegro.
Una vez dentro del parque observamos una mangosta soleándose sobre el tronco de un gran árbol, se trata de una Mangosta roja. La observamos durante 10 minutos hasta que llegan otros vehículos y se asusta.
Recorremos las pistas en busca del mamífero más difícil que nos queda por observar, el Leopardo. No es nada fácil ver a este fenomenal depredador. Al poco tiempo vemos un coche parado al lado de la pista. El conductor hace una señal y vemos aparecer por el lado un precioso leopardo recorriendo la pista. ¡Qué suerte hemos tenido! El primer vehículo de los dos que va el grupo tiene delante al leopardo y lo puede fotografiar a placer. La gente que va en el segundo vehículo lo puede observar por unos segundos mientas se va metiendo a la espesura ante la llegada de más vehículos. ¡Qué gozada ver a este felino!
Continuamos recorriendo las lagunas y viendo de cerca a especies que no todos habíamos podido observar los días anteriores. Tras desayunar en la zona habilitada para tal nos dirigimos hacia la salida y damos con un Abejero oriental posado a pocos metros de la pista. Poco antes de salir, damos con otra especie de mamífero nueva, dos ejemplares de Mangosta marrón India alimentándose en una pequeña charca ¡Mejor imposible!
Salimos del parque y tras poco más de media hora de viaje, paramos a comer para luego salir en dirección a Sigiriya donde llegamos una hora mas tarde. Después de dejar las maletas en las habitaciones, nos dirigimos a explorar el bosque próximo. Nuestra primera parada da como resultado al precioso Zorzal Cetrino y a un grupo de turdoides que resultan ser la endémica Tordina corniparda. Caminamos a lo largo de una pista y entre la espesura vislumbramos un pequeño pájaro que se menea en la umbría. Es la llamativa Pita India que se mimetiza a la perfección en este hábitat. Entre unos grandes árboles próximos canta el endémico Pito sultán de Ceilán, que conseguimos observar durante unos pocos segundos. Continuamos por una zona de bosque encharcada y damos con dos preciosidades, el colorido y diminuto Martin pescador oriental y el Petirrojo azul indio. ¡Un día completo, en este maravilloso país!
Día 5. Sigiriya-Minneriya
Hoy comenzamos el día visitando la fortaleza de Sigiriya a las 7:30 de la mañana para evitar aglomeraciones. Mientras esperamos al guía, algunos participantes consiguen observar el endémico Barbudo frentigualdo. Pasamos la mañana en este espectacular monumento. Después de comer, nos vamos de safari para observar elefantes asiáticos en la reserva de Minneriya. Pronto localizamos a un grupo de 8 ejemplares con crías que se aproximan a nuestros vehículos. Es domingo y día festivo para los budistas por lo que el parque se llena de vehículos que realizan el safari como nosotros. Decidimos ir a otra zona fuera del bullicio para observar alguna especie nueva de ave, ya que hemos podido observar muy bien los elefantes. En los herbazales damos con una Prinia cenicienta, y un bando mixto de Capuchinos tricolor y punteado. Ya de camino al hotel con el autobús, decidimos hacer una última parada en una zona húmeda. Al poco de llegar localizamos 3 Capuchinos Picoplatas indios y un Críalo oriental que sólo es observado por dos personas del grupo. Pero sin duda la gran sorpresa la dio un precioso Búho pescador de Ceilán que salió de un árbol próximo al camino para posarse sobre una rama permitiendo una prolongada observación. ¡Incluso pudimos verlo cazando en las marismas!
Día 6. Sigiriya-Kitulaga
Hoy algunos “valientes” nos hemos levantado a las 5 de la mañana para intentar localizar alguna ave nocturna. Al poco de empezar la búsqueda oímos los primeros cohetes, lo que significa que los elefantes andan cerca. Por seguridad nos quedamos en la proximidad del hotel donde escuchamos el Chotacabras marajá. Conforme amanece, las aves empiezan a despertar y conseguimos observar una nueva especie endémica, el Bulbul cabecinegro. Después de desayunar salimos en dirección al templo de las cuevas de Dambulla.
Entorno a las 10:30 salimos del templo hacia Kitulaga para ver especies de bosques húmedos y dejando atrás los bosques secos. Una hora más tarde, paramos para comer y en los jardines del restaurante vemos dos machos de Koel posados dentro de un arbusto. Tras unas 5 horas de viaje llegamos a este precioso enclave y nos ponemos mano a la obra a buscar nuevas especies. La primera de ella es el Bulbul negro con varios ejemplares yendo y viniendo de un árbol seco. Seguidamente, en un árbol lejano damos con un Loriculo de Ceilán, que sale volando a los pocos segundos. Continuamos caminando entre plantaciones de té y manchas de bosque primario, donde localizamos a un Calao gris cingalés llevando ceba al nido. Ya cuando nos disponemos a volver al vehículo se posa en un árbol próximo el bonito Pito crestigualdo.
Día 7. Kitulaga-Nuwaraeliya
Hoy hemos quedado a las 6:15 para ver aves por el jardín del lodge donde nos alojamos. En este bonito enclave se filmó la mítica película el puente sobre el río Kwai. Las primeras observaciones de la mañana son la de un Mosquitero del Caucaso y la de un grupo de Capuchinos punteados. Pero quizás lo más llamativo fue poder ver una Mangosta gris india a apenas 3 metros de nosotros ¡Una observación muy buena! El animal se encontraba soleándose en el jardín del hotel, seguramente esperando a ser alimentada por algún camarero. Después de desayunar, cogemos una pequeña barca para cruzar el río y así poder adentrarnos a la reserva de Nuwaraeliya. Caminamos por una senda entre campos de té y especias observando la endémica Golondrina de Sri Lanka, la Salangana malabar y Oruguero cabecinegro.
Continuamos por la senda observando en lo alto de un árbol a la bonita Dúcula verde y un grupo de Bulbules orejudos. Una vez llegamos a la reserva compuesta por selva húmeda primaria, se vuelve más complicado observar las aves. Aun así, la primera observación es de una Pita India, seguido del endémico Drongo cingalés. Un grupo de Cimitarras cingalesas revolotean entre el dosel arbóreo pero su carácter tímido dificulta la observación. En un claro, 2 Picaflores piquirrojos se posan por un instante en lo alto de un árbol.
Posteriormente, retornamos al hotel para coger las maletas y salir en dirección a Horton Plains. Poco antes de llegar al hotel paramos en Victoria Park. Este parque es de obligada visita ya que aquí se pueden observar algunas especies de reducida distribución. Al poco de llegar vemos las dos especies de anteojos, el Oriental y el endémico Anteojitos Cingalés. Más tarde danos con el Zorzal de Ward, el cual presenta un bonito patrón de plumaje. Por último, localizamos el colorido y llamativo Papamoscas de Cachemira posado en la vegetación de un riachuelo. Con los objetivos cumplidos, nos dirigimos al hotel a cenar y descansar ya que al día siguiente toca madrugar.
Día 8. Horton Plains-Sinharaja (Crónica del viaje ornitológico a Sri Lanka)
Salimos del hotel a las 5 de la mañana en dirección a Horton Plains. En esta zona montañosa se encuentran dos especies muy esquivas y difícil de observar. En una charca próxima a la carretera hacemos nuestro primer intento para ver el Arrenga de Ceilán y el Zarcero de Ceilán. Tras media hora de espera conseguimos verlos por unos pocos segundos, siempre escondidos entre la vegetación. Estamos casi a dos mil metros de altura y se nota el cambio de temperatura respecto a las zonas bajas. Nos ponemos en marcha buscando una zona soleada para desayunar. Por el camino paramos para ver una pareja de Tarabillas pías y varios ejemplares del impresionante Sambar. Tras el desayuno damos un paseo de una hora hasta la cascada de Baker’s. Por el camino observamos varios ejemplares de Bisbita de Richard y de Bisbita Oriental. Al estar ambas muy próximas podemos apreciar la diferencia de cada una de ellas.
Una vez volvemos a los vehículos salimos en dirección a Sinharaja. El viaje es largo, pero bien vale la pena para poder visitar este espectacular parque natural.
Día 9. Sinharaja
Hoy salimos del hotel a las 5:30 de la mañana con nuestros picnics para desayunar. Salimos con los jeeps y vamos hasta la entrada del parque nacional.
Recorremos con los jeeps las empinadas laderas cubiertas de plantaciones del famoso té de Ceilán, alternadas con parches de bosques húmedos. Al poco tiempo localizamos nuestra primera especie endémica del día, el Mina de Sri Lanka. Continuamos el camino y justo antes de parar para poder ver los endémicos Langures de cara purpurea vemos a otra especie endémica, la bonita Cotorra de Layards. Uno de los rastreadores del parque nos advierte de la presencia de otro estornino endémico, el Estornino Cingalés. Esta posado a cierta distancia en un árbol y solo nos da tiempo a una breve observación con prismáticos. Mientras desayunamos en el centro de visitantes, vemos nuestra primer Águila milana. Esta poderosa rapaz destaca por su color negro homogéneo y el contraste con sus patas amarillas. Continuamos el recorrido a pie por una zona llana observando el colorido Minivet escarlata, y dos especies de papamoscas, el papamoscas pardo y el Muttui. Además, vemos mariposas espectaculares como la mariposa más grande de Sri Lanka, la Sri Lanka birdwing (Troides darsius).
Uno de los rastreadores del parque nos hace una señal para que bajemos por una ladera y nos lleva a ver una preciosa Víbora de Sri Lanka. Esta especie de hábitos nocturnos pasa el día descansando entre la vegetación. Continuamos el recorrido observando una pareja de Orugueros alibarrados y al endémico Zorzal moteado. No sólo disfrutamos de las aves, sino que también de un paisaje espectacular, así como de preciosas orquídeas.
Recorremos una senda próxima por un arroyo donde damos con una pareja de los impresionantes Podargos de Ceilán ¡Qué aves más espectaculares! Mientras disfrutamos de ellos, detectamos entre la espesura una pareja de Malcoha carirrojo pero desaparecen enseguida. Nos movemos entre la vegetación para relocalizar a esta preciosa ave, símbolo del parque nacional. Finalmente damos con ellos y podemos disfrutar de esta bella ave. En la misma zona se mueven un grupo de Charlatán cabecigrís, ¡otra especie endémica observada!.
Continuamos por la senda y damos con el llamativo Trongón malavar.
Empieza a hacer calor y volvemos a nuestros jeeps para ir a comer a un restaurante local. Durante la comida vemos al Drongo de Sri Lanka.
Después de comer nos dirigimos por los pueblos próximos donde observamos varios ejemplares de Bulbul cejiamarillo y a la impresionante ¡Urraca Cingalesa! ¡Qué ave más espectacular!. Conforme avanza la tarde, nos dirigimos a una zona de bosque mixto donde vamos a buscar una joya ornitológica, el Autillo de Thilo Hoffmann. Esta especie fue detectada por primera vez en 2001 y catalogada como especie nueva en 2004. Caminamos entre la espesura de la mano de nuestro rastreador local, y la localizamos entre unas cañas de bambú a apenas 1 metro del suelo. Destacan sus bonitos ojos amarillos que contrastan con el plumaje rojizo.
Finalmente, nos dirigimos al hotel a descansar y celebrar con unas cervezas frías estas fantásticas observaciones en la selva húmeda de Sinharaja.
Día 10. Sinharaja-Udawalawa
Hoy salimos a las 5 de la mañana del alojamiento rumbo a una pequeña aldea donde se puede observar el esquivo y endémico Faisancillo de Ceilán. El ave suele aparecer por los alrededores de una casa por lo que esperamos por la zona. Por una zona encharcada aparece un bonito rálido, la Polluela de la jungla. Disfrutamos de la cacofonía del amanecer, con espectaculares cantos por todos lados. Al poco tiempo escuchamos el reclamo del Faisancillo de la jungla y aparece un macho y una hembra que nos deleita por poco tiempo ¡Fantástico! Después de desayunar buscamos por un herbazal próximo al endémico Coucal de Ceilán. Entre la vegetación aparece esta espectacular ave de tamaño considerable. Esta especie destaca del Coucal chino por el diferente color del pico, otra endémica más observada.
Más tarde volvemos al hotel para comer y hacer las maletas. Después de comer nos ponemos en marcha hacia Udawalawa llegando a nuestro destino 4:30 h más tarde.
Día 11. Bundala-Weligama
Hoy comenzamos la jornada realizando un safari por Udawalawa. Nada más entrar nos sorprende un gran bando de Estorninos rosados. Continuamos con los jeeps viendo Elefantes asiáticos, así como diferentes especies de Prinias y Munias. En una pequeña charca destaca una Avefría malabar. Por el camino, localizamos en un arbusto una de las especialidades del parque, el bonito Iora coliblanco.
El desayuno nos lo comemos junto a una gran laguna donde podemos anotar algunas especies nuevas como el Marabú menor, Espátulas y el Pigargillo común. De camino a la salida del parque nos da tiempo de ver dos especies nuevas, la Cotorra Ciruela y el Malcoha sirkir.
Después de comer, salimos rumbo al Parque Nacional de Bundala. Este parque combina bosque seco y salinas. En la parada del centro de visitantes, vemos una pareja de Íoras común y un Abanico cejiblanco. Al poco de salir llegamos a unas salinas repletas de aves limícolas, donde destaca las bonitas Canasteras Chicas. No lejos de allí, descansa un Cocodrilo de agua salada (Crocodylus porosus). En mitad de la salina vemos a 5 Faralópos picofinos alimentándose activamente, y cerca de ellos destacan un grupo de Charrán Piquigualdo. En un claro repleto de bueyes localizamos un grupo de 30 Terrera Coronigrises ¡Otro día espectacular! Posteriormente nos ponemos en ruta en dirección a nuestro alojamiento a Weligama donde llegamos a las 8:30.
Día 12. Salida a ver cetáceos
Salimos a las 6 de la mañana con el picnic para desayunar. Hoy nos embarcamos desde Mirissa en una excursión de observación de ballenas. Poco después de las 7 de la mañana estamos navegando en dirección SE a la zona donde afloran aguas ricas en nutrientes que hacen que Sri Lanka este entre los mejores sitios del mundo para observar la Ballena azul. Tras casi dos horas de navegación vemos como las distintas embarcaciones se van agrupando, eso sólo puede significar que ha habido alguna observación.
Nada más llegar, vemos el distintivo chorro que producen estos mamíferos al respirar, y hacia allá vamos con la embarcación. Tenemos varias observaciones lejanas, pero justo cuando las otras embarcaciones se dirigían de vuelta al puerto, apareció de la nada una hermosa ballena a apenas 15 metros de la embarcación. ¡Todos nos quedamos impresionados de ver a este formidable gigante!
En el recorrido de vuelta a la bahía pudimos anotar tres especies nuevas de aves, el Fumarel aliblanco, el Charrán sombrio y el embridado.
Una vez llegamos al puerto, nos dirigimos al hotel a comer. Mientras disfrutábamos del postre, un Pigargo Oriental nos deleitó con su vuelo. El resto de la tarde lo dedicamos a ir de compras por las calles de Mirissa.
Día 13. Kirala Kale Matara-Galle-Negombo
Hoy es nuestro último día en Sri Lanka. Tras el desayuno, salimos al humedal de Kirala Kale Matara. Entre los arrozales y arboledas podemos anotar algunas especies nuevas como el Carricero de Blyth y el Oruguero de Mecé. Ya cuando nos disponíamos a volver al autobús un par de Gavilanes Shikra vuelan sobre nosotros permitiendo mejores observaciones que en los días anteriores.
Tras una hora de viaje en el autobús llegamos a la ciudad fortificada de Galle, construida durante la época colonial por los portugueses. Tras comer en un restaurante y realizar algunas compras salimos hacia el alojamiento en Negombo, donde llegamos a tiempo para realizar la lista de especies observadas y comentar las impresiones sobre el viaje.
Sin ninguna duda que repetiremos este viaje en enero 2020. Sri Lanka ofrece una variedad extraordinaria de aves, con más de 30 especies endémicas. Además, la variedad de mamíferos es realmente impresionante, siendo uno de los mejores sitios para poder observar leopardo y ballena azul. Nos hemos sentido como en casa, los cingaleses han sido muy hospitalarios con nosotros. ¡No dudes en unirte a nuestro próximo viaje a Sri Lanka en enero de 2020!