En la fotografía se aprecia el gran tamaño de la culebra bastarda que entró en nuestro hospital de fauna.En la fotografía se aprecia el gran tamaño de la culebra bastarda que entró en nuestro hospital de fauna.Como sabéis, durante el pasado verano estuvimos trabajando a todo gas para sacar adelante a las múltiples crías de animales, los aún torpes pollos volantones de muchas especies de aves y la oleada de vencejos que nos llegaban al Hospital de Fauna Salvaje de GREFA. Aunque la mayoría de los animales que ingresan en nuestro centro son aves, lo cierto es que nuestras instalaciones tienen cabida para todos los animales salvajes que sufren algún problema o peligro. En otras palabras, no sólo tratamos aves, también mamíferos, reptiles o anfibios. El reciente caso de la recuperación en nuestro hospital de fauna de una culebra bastarda que ingresó en nuestro centro gravemente herida es un buen ejemplo para recordar que todas las especies salvajes autóctonas pueden beneficiarse de los cuidados de los equipos de veterinarios y rehabilitadores de GREFA. Los miles de animales de las más diversas especies que atendemos anualmente son buena prueba de ello.

Un ejemplo es la protagonista de esta historia, que se inicia a mediados del pasado junio, cuando el Equipo de Rescate de GREFA recibió un aviso procedente de la Policía Local de Leganés. Los agentes nos informaron de la presencia de una culebra bastarda de tamaño considerable atrapada en un aparcamiento que parecía estar herida. Nuestro Equipo de Rescate se trasladó al lugar para localizar y atrapar al escurridizo animal. A su llegada a nuestro hospital de fauna pudimos comprobar que presentaba heridas extensas de origen desconocido, posiblemente mordiscos de algún perro o gato que se había dedicado a “jugar" con el reptil.

La extensión y profundidad de las heridas era tal que hacían peligrar la vida del animal. Se encontraban expuestos músculos, fascia y nervios haciendo su pronóstico muy grave. Tras estabilizarle, se procedió a su sedación para desbridar las heridas y poder continuar su tratamiento con el uso de antibioterapia, curas y apósitos. Tras las primeras semanas, en las que se consiguió controlar la infección gracias a la antibioterapia de soporte y el uso de miel en las heridas por sus propiedades antisépticas y cicatrizantes, se procedió a cambiar a un tipo de apósitos que acelerara la cicatrización de las heridas y permitiese un manejo menos intensivo del animal. Las culebras son muy escurridizas y el manejo continuado, junto al dolor, había vuelto a este ejemplar muy esquivo al tratar de cogerlo para administrar los tratamientos.

Evolución de la herida de la culebra bastarda tras ingresar en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA.Evolución de la herida de la culebra bastarda tras ingresar en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA.

Los reptiles tienen un metabolismo muy lento, que hace que tanto el desarrollo de las enfermedades como la curación de las mismas sea un largo proceso. Por este motivo, se intentó acelerar la cicatrización mediante la aplicación de sesiones de laserterapia con K-láser tipo IV, del que disponemos gracias a la colaboración de Avanvet. Gracias a los cuidados del equipo de veterinarios y voluntarios de GREFA y a su paciencia las heridas de la culebra bastarda terminaron por cicatrizar tras un mes y medio de permanencia en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA. Hoy en día ya vive de nuevo en libertad tras haber sido devuelta sana y salva a la naturaleza.


Liberación de la culebra bastarda recuperada en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA.