Por estas fechas ¡no dejan de llegarnos pequeños animales huérfanos! Aunque muchos de ellos se encuentran en perfectas condiciones y sólo necesitan comida y calor, muchos otros tienen alguna patología que requiere de los cuidados de nuestros veterinarios. Este es el caso de un pequeño erizo rescatado por un particular en Villanueva de la Cañada (Madrid), al que nuestro equipo veterinario tuvo que brindar especiales cuidados.
Lo más frecuente es que los pequeños se presenten deshidratados e hipotérmicos, por haber pasado unas horas sin sus padres. No obstante, en otras ocasiones tienen lesiones traumáticas asociadas a caídas del nido o producidas por algún animal (perro, gato o urracas generalmente) que les encuentra antes que su benefactor, el cual acude a nosotros para que pueda recibir atención veterinaria.
La cría de erizo de la que hoy os queremos hablar, además de estar muy parasitada por pulgas y garrapatas, presentaba una lesión en la nuca de origen desconocido. A pesar de ser muy pequeño, el erizo tuvo que ser anestesiado en nuestra enfermería para valorar la herida, debido a que el mecanismo de defensa de estos animales se presenta desde temprana edad, haciéndose “bola” sobre sí mismo mientras intentábamos examinar la gravedad de la lesión. La herida, aunque profunda, pudo ser suturada tras limpiarla en profundidad.
En estos momentos el departamento de Animales Huérfanos de GREFA y la enfermería de nuestro hospital de fauna trabajan juntos para conseguir que este animal pueda ser devuelto a la libertad cuando sea lo suficientemente adulto como para sobrevivir por sí mismo.