Una de las águilas de Bonelli trasladadas de Italia a España es objeto de revisión veterinaria en las instalaciones de GREFA en Majadahonda (Madrid). Foto: GREFA.Una de las águilas de Bonelli trasladadas de Italia a España es objeto de revisión veterinaria en las instalaciones de GREFA en Majadahonda (Madrid). Foto: GREFA.Desde hoy las dos águilas de Bonelli vivirán en el centro de cría en cautividad de especies amenazadas que GREFA tiene en Majadahonda (Madrid). Los pollos que nazcan de ellas se liberarán en el futuro en Italia, en apoyo a la amenazada población de águila de Bonelli en ese país.

4 de febrero de 2015 / Dos águilas de Bonelli o perdiceras procedentes de Italia han sido hoy instaladas en el centro de cría en cautividad de especies amenazadas que GREFA tiene en Majadahonda (Madrid). En una colaboración sin precedentes, esta asociación naturalista llevará a cabo la reproducción de estas aves y los pollos que nazcan serán liberados en el futuro en Italia para reforzar la actual población de águila de Bonelli en este país, casi toda ella restringida en la actualidad a la isla de Sicilia.

Las dos águilas de Bonelli, que llegaron a Madrid en un avión procedente de Roma, son ejemplares silvestres que les fueron incautados en su momento a expoliadores de nidos que las extrajeron ilegalmente de su hábitat natural siciliano cuando eran pollos. Actualmente tienen tres y cuatro años de edad, respectivamente. Tras su ingreso en el centro de cría de GREFA, ambos ejemplares fueron objeto de una intensa revisión por nuestro equipo de veterinarios antes de ser instaladas en el recinto de cría en el que vivirán.

El traslado de las dos águilas de Bonelli entre Italia y España se ha llevado a cabo con las autorizaciones CITES necesarias para el movimiento internacional de vida silvestre y ha sido posible gracias a la iniciativa del Coordinamento Tutela Rapaci Sicilia, la entidad que se encarga del seguimiento de las últimas águilas de Bonelli italianas, y la colaboración del Corpo Forestale dello Stato, equivalente a los agentes forestales españoles. Desde España ha colaborado el  Servicio Oficial de Inspección, Vigilancia y Regulación del Comercio Exterior (SOIVRE), de la Secretaria de Estado de Comercio.

Desde 2009, GREFA ha conseguido criar en sus instalaciones más de veinte ejemplares de águila de Bonelli, todo un récord en Europa para una especie cuya reproducción en cautividad conlleva una extraordinaria complejidad y que solo está al alcance de centros especializados con gran experiencia y capacitación profesional. En la actualidad la ONG cuenta con siete parejas reproductoras, de las cuales tres han realizado ya puestas en años anteriores. En la actual temporada de cría, ya iniciada, dos de estas parejas ya han hecho sus puestas estos días atrás.

La mayoría de los pollos de águila de Bonelli nacidos en GREFA tienen como destino las reintroducciones que se están llevando a cabo en el marco de Life Bonelli, el proyecto que por primera vez aborda la recuperación de la población española de esta rapaz, una de las más amenazadas de Europa, en territorios que históricamente ocupó. En el marco de Life Bonelli se prevén colaboraciones con otros proyectos y actuaciones, como la desarrollada ahora entre España e Italia.

Pablo Izquierdo, responsable de cría en cautividad de GREFA, sujeta a una de las águilas de Bonelli trasladadas a España, junto con agentes de las autoridades italianas encargados del operativo. Foto: GREFA.Pablo Izquierdo, responsable de cría en cautividad de GREFA, sujeta a una de las águilas de Bonelli trasladadas a España, junto con agentes de las autoridades italianas encargados del operativo. Foto: GREFA.

Línea de colaboración con Italia

No es la primera vez que GREFA presta su ayuda en beneficio de la biodiversidad de Italia. Estos años atrás, la ONG ha enviado buitres leonados para reforzar las poblaciones italianas de la especie, concretamente en Sicilia y en el sur de la Italia continental (Parque Nacional del Pollino). También ha aportado su experiencia con rapaces para asesorar al país en la recuperación de especies como la propia águila de Bonelli, el quebrantahuesos, el buitre negro, el alimoche y el cernícalo primilla.

"Estamos orgullosos de poder contribuir a salvar la población italiana de la especie, en un ejemplo más de que la conservación de las especies amenazadas no es un reto exclusivo de una región o país, sino que debe apoyarse en la acción y la colaboración internacional, algo por lo que GREFA está apostando fuerte en los últimos años", indica Ernesto Álvarez, presidente de GREFA y uno de los impulsores del proyecto LIFE Bonelli.

GREFA se fundó en 1981 y desde entonces esta ONG ha atendido a unos 50.000 animales en su Centro de Recuperación de Fauna Salvaje, el más grande y de más actividad de Europa en su especialidad. En todo ese tiempo, GREFA se ha consolidado también como referencia internacional en la atención a la fauna autóctona con más problemas de conservación, a través de un extenso catálogo de acciones, como cría en cautividad, reintroducción o reforzamiento de poblaciones silvestres, seguimiento vía satélite y vigilancia de nidos.