Por productividad y variedad de especies, las instalaciones de GREFA albergan el principal centro de cría de fauna autóctona de España. El águila de Bonelli, el buitre negro, el águila real, el cernícalo primilla y el galápago europeo son especies amenazadas que GREFA está criando.
27 de agosto de 2015, Majadahonda (Madrid). Con el nacimiento en la temporada reproductora de 2015 de unos cuatrocientos animales, pertenecientes a la fauna autóctona española, el Centro de Cría en Cautividad de GREFA se consolida como el más importante de nuestro país en su especialidad si atendemos a los criterios de productividad y variedad de especies. La mayoría de estos ejemplares pertenece a especies catalogadas como amenazadas a escala estatal o regional, como es el caso del águila de Bonelli, el buitre negro, el águila real, el cernícalo primilla y el galápago europeo.
Un equipo de profesionales y voluntarios atiende estas instalaciones, situadas en el mismo recinto que el Hospital de Fauna Salvaje del que GREFA dispone en Majadahonda (Madrid). La dedicación constante de este equipo hace posible que cada año nazcan y crezcan centenares de animales, que luego serán destinados a su liberación en el medio natural para crear nuevas poblaciones silvestres (o reforzar las ya existentes) de las especies a las que pertenecen.
En el caso del águila de Bonelli, también conocida como águila perdicera, los cuatro ejemplares criados en cautividad este año por GREFA vuelan ya en dos de las zonas de reintroducción seleccionadas desde el proyecto LIFE Bonelli, concretamente en Mallorca, que ha recibido dos de esas aves, y en Navarra, que ha acogido las otras dos. LIFE Bonelli es el proyecto avalado por la Unión Europea y participado por varias comunidades autónomas, que pretende la vuelta de una de las grandes rapaces más amenazadas de Europa a territorios que históricamente ocupó.
También están ya por estas fechas en sus zonas de reintroducción un buitre negro y un águila real nacidos en 2015 en nuestras instalaciones. El primero ha sido trasladado al Pirineo catalán (Reserva de Boumort, Lleida), donde se ha conseguido en los últimos años crear una nueva colonia de una especie que llevaba más de un siglo extinguida en estas montañas. El destino del segundo ha sido el Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés (Ourense), donde se lleva a cabo un proyecto de reintroducción del águila real, catalogada en Galicia como “En peligro de extinción”.
Pero si hay una especie en la que la experiencia de GREFA en la reproducción en cautividad de fauna silvestre esté resultando decisiva es el cernícalo primilla. En la temporada de cría que acaba de concluir, esta ONG ha logrado sacar adelante casi trescientos pollos de este pequeño halcón. Como en años anteriores, cifras tan productivas tienen un objetivo: reforzar las poblaciones silvestres de la especie o crear otras nuevas, como ya se ha hecho en 2015 en muchas colonias de cernícalo primilla situadas en numerosas localidades de la Comunidad de Madrid, Castilla y León y Andalucía.
Próximo reto: criar águilas imperiales
El cernícalo vulgar y la lechuza común son aves que, a diferencia de las anteriores, no están catalogadas como amenazadas a escala estatal o regional, pero pueden llegar a tener un interés conservacionista importante. Ejemplo de ello es que gracias a ambas estamos abordando el control biológico de las plagas de topillo en los secanos cerealistas de Castilla y León, ya que estas rapaces son grandes depredadoras de roedores. En la pasada temporada de cría nacieron en nuestras instalaciones 40 cernícalos vulgares y 25 lechuzas comunes.
Mención especial merece el trabajo que desde GREFA hacemos con el galápago europeo, uno de los reptiles más amenazados de la fauna ibérica. En 2015 han nacido en el área especialmente construida para esta especie dentro de nuestro centro casi medio centenar de ejemplares, tanto de forma natural (las puestas eclosionan en una zona de charcas artificiales que recrea su hábitat natural), como de forma artificial (en incubadoras).
“Gracias a nuestro equipo de cría en cautividad y los voluntarios que lo apoyan estamos contribuyendo con los animales que nacen en nuestras instalaciones a recuperar poblaciones de especies amenazadas”, explica Pablo Izquierdo, responsable de cría en cautividad en GREFA, que adelanta que el próximo objetivo será lograr reproducir al águila imperial ibérica, para lo cual se cuenta ya con una pareja de esta especie en peligro de extinción cedida por la Junta de Andalucía.