Control biológico: magnífico balance de anillamientos y recuperaciones de rapaces

Anillamiento de un joven mochuelo común dentro del proyecto del control biológico del topillo de GREFA.

Detalles: Publicado: 10 Enero 2023; Visto: 800

Los comienzos de año son un buen momento para hacer balance. Es por ello que os traemos algunos de los resultados de los programas de conservación que realizamos en GREFA desde hace años: el control biológico del topillo campesino en Castilla y León. En concreto, repasamos los resultados de los anillamientos y las recuperaciones de las especies de rapaces depredadoras del roedor con las que trabajamos.

Dentro de las líneas de trabajo de nuestro proyecto de control biológico del topillo campesino juega un papel fundamental el seguimiento de las aves rapaces depredadoras del roedor en las miles de cajas nido que tenemos instaladas con el objetivo de fomentar sus poblaciones. Para ello, empleamos diferentes metodologías. La más generalizada es la observación directa del interior del nido para la identificación de la especie (lechuza común, cernícalo vulgar y mochuelo europeo) y la valoración de parámetros reproductivos.

Otro sistema de seguimiento más acotado por su elevado coste es el equipamiento de ejemplares de cernícalo vulgar con dispositivos GPS, que nos permiten conocer en tiempo real la ubicación exacta del individuo. Esta es una metodología muy útil que hemos incorporado de forma pionera no solo como herramienta de conservación sino de gestión agrícola, por la información que nos reporta sobre los tipos de cultivo donde campean los cernícalos marcados con GPS y la posible abundancia de roedores en los mismos.

Anillamiento de un pollo de lechuza común por parte del equipo de control biológico de GREFA.

También practicamos otra forma de monitorización individualizada más rudimentaria pero muy útil: el anillamiento científico. Este sistema lo aplicamos de forma generalizada en ejemplares de lechuza común y mochuelo europeo y, en circunstancias más aisladas, también lo empleamos con el cernícalo vulgar. Son muy reveladores los resultados obtenidos por nuestro compañero Carlos Cuéllar, anillador específico del proyecto de control biológico del topillo campesino, durante la última campaña de anillamiento realizada entre diciembre de 2021 y julio de 2022 sobre unas 320 cajas nido distribuidas en diferentes zonas de estudio de las provincias castellanoleonesas de Segovia, Burgos, Palencia, Valladolid y Ávila: 106 anillamientos (63 lechuzas comunes, 35 mochuelos europeos y 8 cernícalos vulgares), así como 24 recuperaciones de ejemplares ya anillados (13 lechuzas, 10 mochuelos y un cernícalo vulgar).

Recapturados a los cuatro años

Respecto a los datos de recuperaciones, merece la pena resaltar que nos ha permitido corroborar una vez más la fijación de ejemplares a los diferentes territorios donde fueron anillados. Se da tanto el caso de pollos nacidos en cajas nido que se han establecido como reproductores en otras cajas nido próximas del mismo territorio como el de ejemplares que fueron anillados como adultos reproductores en campañas previas y siguen reproduciéndose en el mismo territorio donde se les detectó por primera vez.

Las recapturas de mayor antigüedad corresponden a una lechuza y un cernícalo vulgar, ambos capturados cuatro años después de su anillamiento en los municipios de Palencia y Valladolid donde fueron anillados respectivamente. No tan antiguos son los datos de recapturas de mochuelos, pero si esperanzadores, puesto que han supuesto una notable representación del total de recapturas, la mayoría en una zona segoviana donde hemos realizado una importante apuesta por la conservación y recuperación de esta especie, que está dando sus frutos.

Agradecimientos

Agradecemos al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico su apoyo a este trabajo, a la Junta de Castilla y León la expedición de los permisos, a Antonio Herrero y el grupo URZ por el aval a nuestro compañero Carlos Cuéllar, al CMA de la Sociedad Española de Ornitología el certificado de aptitud de anillador y, por supuesto, a los compañeros y voluntarios de GREFA que han ayudado en tan laboriosa pero gratificante tarea. Esperamos que la próxima temporada de 2023 nos traiga resultados tan interesantes.