Dos pollos de águila de Bonelli nacidos en 2024 en el Centro de Cría en Cautividad de GREFA. Foto: Javier Lobón Rovira.
Dos pollos de águila de Bonelli nacidos en 2024 en el Centro de Cría en Cautividad de GREFA. Foto: Javier Lobón Rovira.

Se nos acumulan las buenas noticias sobre el número de parejas, las puestas exitosas y los pollos nacidos en la población de águila de Bonelli de la Comunidad de Madrid. Todo apunta a un despegue definitivo sin vuelta atrás. Eso sumado a la disminución de la mortalidad, en especial la causada por electrocución, hace que experimentemos la inmensa alegría de estar cosechando los resultados de tantos años de trabajo.

A finales de abril GREFA anunciaba la cifra récord de águilas de Bonelli criando en la Comunidad de Madrid en 2024. Pues bien, de histórica puede también calificarsse la cantidad de pollos que han nacido de esas puestas. De las diez parejas existentes en la Comunidad de Madrid ocho iniciaron la reproducción y ni una sola de ellas ha fracasado, habiendo nacido finalmente diez pollos: seis parejas han tenido uno, mientras que dos han hecho doblete. Se da además la circunstancia poco frecuente de que una de las hembras con dos pollos es primeriza, aunque su inexperiencia no le está impidiendo sacar adelante a sus dos vástagos de forma impecable.

A lo largo del pasado mes de mayo ya hicimos la revisión veterinaria, el anillamiento y la colocación de emisores GPS a esos pollos, como siempre previa autorización de la Dirección General de Biodiversidad y Gestión Forestal de la Comunidad de Madrid. Además, hemos contado con la ayuda y colaboración del GIAM (Grupo de Intervención en Altura de los Agentes Forestales de Madrid) y, por supuesto de los técnicos especialistas en marcajes de fauna con GPS del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Víctor García Matarranz y Andreia Dias). Se trata de actuaciones muy bien planificadas y ejecutadas para que todo se desarrolle en el menor tiempo posible y que los pollos enseguida se encuentren otra vez sobre sus nidos al cuidado de sus padres.

"Noria", madre primeriza de la población madrileña de águila de Bonelli, con sus dos pollos ya muy crecidos en el nido."Noria", madre primeriza de la población madrileña de águila de Bonelli, con sus dos pollos ya muy crecidos en el nido.

Líneas de acción simultáneas

Qué importante es la incorporación de estos pollos a la población madrileña de águila de Bonelli, la gran mayoría nacidos de parejas reproductoras en las que uno o ambos miembros son ejemplares reintroducidos por GREFA a través de acciones realizadas estos años atrás, como por ejemplo las encuadradas en el proyecto europeo AQUILA a-LIFE, que coordinó nuestra ONG.

Por si fuera poco, contamos con otras líneas de acción destinadas a reforzar esta población madrileña. Una de ellas son las cesiones de pollos de águila de Bonelli también nacidos en el medio natural, pero en este caso en Andalucía, donde se encuentra la población europea más abundante de esta especie. Desde hace años la Junta de Andalucía cede solidariamente a otras comunidades autónomas ejemplares extraídos de nidos con más de un pollo.

Primer plano de uno de los pollos de águila de Bonelli nacidos en 2024 en la Comunidad de Madrid.Primer plano de uno de los pollos de águila de Bonelli nacidos en 2024 en la Comunidad de Madrid.

Precisamente cuatro águilas de Bonelli procedentes de Andalucía oriental y nacidas este mismo año han sido ya introducidas en la "jaula-hacking" que tenemos instalada en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares como punto de aclimatación previa a la reintroducción de estas aves. Las cuatro águilas de Bonelli andaluzas llegaron a esta instalación el pasado 17 de mayo y permanecerán en ella aclimantándose durante varias semanas, con vistas a que contribuyan al reforzamiento de la población madrileña una vez que sean liberadas.

Agentes del GIAM y técnicos de GREFA realizan trabajos en altura para extraer momentáneamente a los pollos de un nido de águila de Bonelli de la Comunidad de Madrid con el fin de colocarles un emisor GPS. Al mismo tiempo se aprovecha para revisar y ajustar una cámara de vigilancia.Agentes del GIAM y técnicos de GREFA realizan trabajos en altura para extraer momentáneamente a los pollos de un nido de águila de Bonelli de la Comunidad de Madrid con el fin de colocarles un emisor GPS. Al mismo tiempo se aprovecha para revisar y ajustar una cámara de vigilancia.

Desde el programa de cría

Mientras tanto, el programa de cría en cautividad del águila de Bonelli que desarrollamos desde nuestro centro de Majadahonda (Madrid) no se queda a la zaga y sigue año tras año trabajando también por esta especie. De hecho, dos de los pollos que hemos criado en cautividad en 2024 protagonizan acciones desarrolladas por GREFA en la Comunidad de Madrid. Uno de ellos se ha destinado a realizar un "fostering", es decir, introducirlo en el nido natural de una pareja silvestre para que sea ella quien lo termine de criar, acción que os contaremos próximamente con todo lujo de detalles. Un segundo ejemplar de cría en cautividad se trasladará en breve a la “jaula-hacking” del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, con lo que suman 16 los pollos nacidos o liberados en la actual campaña madrileña de águila de Bonelli.

Estamos seguros de que estas nuevas incorporaciones, sumadas a los individuos flotantes de temporadas anteriores todavía sin emparejar, no sólo permitirán afianzar definitivamente el núcleo reproductor madrileño sino que serán pioneros en la recolonización de otras provincias vecinas, algo que por cierto ya ha empezado a ocurrir, puesto que este año una de las hembras del proyecto ha tenido dos pollos en la provincia de Toledo, muy cerca del límite con la Comunidad de Madrid. Sin duda un presagio de lo que esperamos esté por venir.

Nacho y Rafa, propietarios de dos fincas madrileñas colaboradoras de GREFA, son los encargados de introducir dos de los pollos de águila de Bonelli procedentes de Andalucía en la "jaula-hacking" del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.Nacho y Rafa, propietarios de dos fincas madrileñas colaboradoras de GREFA, son los encargados de introducir dos de los pollos de águila de Bonelli procedentes de Andalucía en la "jaula-hacking" del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.

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