Estas gestiones fueron iniciadas fueron por nuestro colaborador Diego Jordano, profesor de la Universidad de Córdoba, y Nacho, un alumno suyo de la localidad. Todo ello se tradujo en una visita de nuestros compañeros de GREFA-Andalucía a dos terrazas de la iglesia de la Vera Cruz-Santa Marina, que reunían las condiciones mínimas para intentar ampliar el sustrato de nidificación del cernícalo primilla. Nos acompañó el titular de la parroquia, el padre David, al que desde aquí queremos agradecerle su comprensión y permisividad para llevar a cabo nuestra actuación en favor de nuestros cernícalos primilla.
Previamente se comprobó que las parejas existentes, al menos dos, estaban asentadas en la zona trasera del edificio, en una serie de mechinales que no fueron cegados en restauraciones previas. La situación nos permitía por tanto trabajar con la tranquilidad de saber que no íbamos a interferir en las parejas ya asentadas en el edificio.
Se optó por equipar con cajas nido la zona de mejor orientación, la azotea orientada al sureste. Previamente se había adaptado a las cajas nido un techado inclinado para que las palomas no pudiesen nidificar sobre el mismo. Este techado se construyó con aislante térmico, recubierto con una capa de mortero hidrófugo e ignífugo. Las cajas nido se pintaron de blanco para integrarlas en las paredes encaladas de la parroquia. Se instalaron un total de 13 cajas nido.
Esperamos que en un futuro este enclave incremente el número de parejas de cernícalo primilla gracias a esta actuación. Todo un reto, como no podía ser de otra manera.