Lo que comúnmente se conoce como “hotel" para insectos no es nada más y nada menos que una reproducción de las condiciones idóneas para que algunos invertebrados decidan pasar el invierno en él y completar su ciclo vital. Es justo lo que desde el Departamento de Educación Ambiental de GREFA acabamos de instalar como un nuevo recurso didáctico de nuestro centro "Naturaleza Viva": un insectario o refugio para insectos que contribuirá a que acerquemos más a los escolares y al resto de visitantes esa naturaleza tan cercana pero a veces tan desconocida que los insectos y otros artrópodos representan.
Los insectos suman el 70% de las especies animales conocidas en el planeta (y las que nos faltarán por descubrir y catalogar) y resultan imprescindibles por las funciones que cumplen en los ecosistemas, como son la polinización, la eliminación de la suciedad y el control del parasitismo. Si los insectos son importantes para los ecosistemas también lo son, y mucho, para el ser humano, ya que gran parte de los cultivos dependen de que haya insectos y de que cumplan su función. Sin insectos no tendríamos plantas y casi (o sin el casi) no tendríamos prácticamente nada con lo que alimentarnos.
Nos gustaría hacer aquí una referencia al libro "Primavera silenciosa", publicado en 1962 por la bióloga marina y zoóloga estadounidense Rachel Louise Carson y que tiene mucho que ver con una de las principales amenazas para los invertebrados y toda la red de comunidades biológicas que dependen de ellos: los pesticidas y otros contaminantes químicos. Utilizando un lenguaje transparente, con el rigor propio del mejor análisis científico y ejemplos estremecedores, Carson denunció los efectos nocivos que para la naturaleza tenía el empleo masivo de productos químicos como el DDT. Su trascendencia fue tal que este libro hoy está considerado uno de los principales responsables de la aparición de los movimientos ecologistas a favor de la conservación de la naturaleza.
De hecho, "Primavera silenciosa" consiguió lo que pocos textos científicos logran: iluminar nuestros conocimientos de procesos que tienen lugar en la naturaleza y despertar el interés de la sociedad tanto por la ciencia que es necesaria para comprender lo que sucede en nuestro planeta, como por la situación presente y futura de la vida que existe en él. Pasados más de cincuenta años, "Primavera silenciosa" sigue teniendo la misma vigencia porque nunca como hasta ahora se vierten a la biosfera tantos biocidas.
Desde GREFA, esperamos contribuir con nuestra labor de educación ambiental a un mundo menos contaminado y más acogedor para especies y hábitats. Guiados por ese objetivo os invitamos a conocer nuestro nuevo insectario y el resto de recursos didácticos y los recintos de fauna viva que conforman el centro de educación ambiental “Naturaleza Viva” de GREFA, situado en Majadahonda (Madrid). Tenéis más información a través de la web de educación ambiental de GREFA, en http://educacion.grefa.org, o a través del teléfono 91 638 75 50 y el e-mail Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.