Primer plano de picogordo que ingresó en nuestro centro afectado por la caza con liga.El pasado 16 de marzo el Hospital de Fauna Silvestre de GREFA recibió el ingreso de un macho de picogordo, que un particular trasladó hasta nuestro centro. El ejemplar, según la información del donante, había sido encontrado sin poder volar. Tras el examen veterinario, pudo determinarse que el pequeño animal tenías las plumas deterioradas por una sustancia pegajosa que le afectaba a las plumas primarias de ambas alas y la cola impidiéndole volar. No era difícil deducir la causa de su problema.

La caza con liga es un método tradicional de captura de pequeñas aves que ha sido prohibido debido a los problemas que acarrea. Se trata de un sistema de caza totalmente inespecífico, que además de estropear las plumas de las aves capturadas puede derivar en fracturas de las pequeños y delicadas extremidades de las especies de paseriformes que suelen quedar atrapadas.

Este tipo de caza ha originado a lo largo de la historia verdaderas masacres de mano de los llamados silvestristas, que elegían este método de captura para comerciar con las aves cantoras. Sin embargo, como decíamos, no se trata de un método selectivo, por lo que rapaces de pequeño tamaño como cernícalos vulgares y lechuzas han llegado a nuestro centro en ocasiones anteriores por el mismo motivo.

Tras repetidas limpiezas del plumaje para intentar eliminar la mayor parte del material dañino, esperamos que el picogordo pueda recuperar la libertad lo antes posible. Sin embargo, lo que nos preocupa es: ¿Qué ocurrirá con todos aquellos animales que no sean asistidos a tiempo? ¿Qué pasa con todos los que no son salvados de la pegajosa trampa?

Voluntarios limpian el plumaje del picogordo con arena de sílice, cepillo y... ¡paciencia!