Durante esta semana hemos incorporado tres ejemplares de cigüeña negra al centro "Naturaleza Viva", conformado por los recintos que dedicamos a la educación ambiental. Las tres aves proceden de un centro de recuperación de fauna silvestre de Bulgaria que no disponía de instalaciones adecuadas para mantenerlas, ya que se trata de animales irrecuperables para la vida en libertad. Estas cigüeñas negras llegaron con nuestros colegas naturalistas de Green Balkans, que se han desplazado a España para recoger a su vez una treintena de buitres leonados, con destino al programa de reintroducción de esta rapaz necrófaga en Bulgaria.
Pretendemos que estas tres cigüeñas negras que han empezado a convivir con nosotros sean el hilo conductor para hablar a los amigos, grandes y pequeños, que nos visitan de la necesidad de conservar en buen estado los dos ecosistemas de los que depende esta preciosa especie: el bosque mediterráneo, por un lado, y los ríos, lagunas y embalses, por otro. Aprovechamos para contaros que la cigüeña blanca y la cigüeña negra son una muestra de cómo dos especies filogenéticamente tan próximas evolucionan de manera tan diferente en cuanto al comportamiento y requerimientos ecológicos. Mientras la primera representa como ninguna otra a las aves antrópicas, propias de ambientes humanizados, la segunda es un ser esquivo y tímido que requiere zonas aisladas bien conservadas.