Os mostramos el Lechuzar de GREFA y os proponemos un juego

Detalles: Publicado: 13 Abril 2020; Visto: 3678

Lechuza posada en una viga del interior del Lechuzar de GREFA.

Si hace pocos días os invitábamos a conocer a través de nuestra web el recinto de las grandes águilas de nuestro Centro de Educación Ambiental "Naturaleza Viva" y pudisteis asistir al momento del baño de un águila real, hoy es día en el que os mostramos el Lechuzar de GREFA. Haciendo de la necesidad virtud, estas semanas de confinamiento nos servirán para que conozcáis mejor nuestras instalaciones, los animales alojados en ellas y los recursos educativos con los que contamos.

Qué mejor manera que empezar esta "visita" que explicaros qué es el Lechuzar. Pues bien, se trata de una instalación en la que hemos reconstruido un antiguo granero o pajar de una casa rural, donde vive unos de los habitantes que de siempre ha estado ligado al ser humano: la lechuza. Aunque lo cierto es que las lechuzas ya no son tan frecuentes (estudios recientes muestran que han desaparecido el 40% de las que había en nuestros pueblos y campos), debido sobre todo al impacto negativo de los rodenticidas y fitosanitarios utilizados en la agricultura.

Volviendo a nuestro Lechuzar, en este recinto tenemos alojadas una pareja de lechuzas que por diversas lesiones no pudieron ser devueltas al medio natural y que pueden ser observadas por nuestros visitantes a través de un cristal espía en un ambiente de seminocturnidad, desde una antesala que nos traslada a la noche para conocer cómo son y cómo viven estas singulares rapaces nocturnas.

El hombre siempre ha sentido atracción por las lechuzas y, por ejemplo, en la cultura griega Atenea, la diosa de sabiduría, era simbolizada por una lechuza. Esta alianza entre hombres y lechuzas ha permanecido durante siglos, ya que estas aves eran verdaderos aliados nuestros al controlar eficazmente la presencia de roedores (ratas y ratones) en los medios humanizados. Por desgracia a aquellos tiempos en los que valorábamos a la lechuza como rodenticida natural les siguieron otros más recientes en los que se empezó a tirar de productos químicos contra las plagas de la agricultura, que al mismo tiempo fue provocando la desaparición paulatina de las lechuzas.

Interior del Lechuzar de GREFA, a imitación de una construcción rural.

La pareja reproductora

En el interior del Lechuzar de GREFA, en el ambiente de penumbra que le caracteriza, bien puede ocurrir que una de las lechuzas que lo ocupan nos observe de manera hierática y de repente se refugie en el nido, al que accede por un agujero en la pared. Allí se encuentra la otra lechuza, que en ese momento está echada sobre cuatro blancos huevos que lleva incubando desde hace poco más de una semana.

Este es un detalle importante: además de servir como instalación educativa, el Lechuzar al mismo tiempo nos permite reproducir en cautividad esta especie y poder liberar a los pollos que aquí nacen en diversos proyectos para reforzar las poblaciones naturales de lechuzas. La incubación de los huevos, el nacimiento y el desarrollo de los pollos lo podemos ver en una pantalla gracias a la cámara situada en el interior del nidal.

Fijaos lo que da de sí esta instalación que se visita siempre en compañía de un educador de GREFA, ya que también hablamos del resto de las rapaces nocturnas ibéricas (búho real, búho chico, cárabo, mochuelo, autillo y lechuza campestre), de las que en otra zona de la instalación un equipo de sonido reproduce sus cantos y sonidos para poder identificarlos.

Puesta de finales del pasado marzo de la pareja de lechuzas que cría en nuestro Lechuzar.

Útil para el control biológico

Al entrar y salir del Lechuzar nos encontraremos con un panel grande, así como unas cajas nido para lechuzas, cernícalo vulgar y mochuelo colocadas sobre postes de madera, lo que nos permite explicar el proyecto de control biológico del topillo campesino que GREFA realiza en Castilla y León desde hace más de diez años.

La lechuza es una de las protagonista del proyecto, que consiste en potenciar a los depredadores naturales para controlar las plagas de roedores en medios agrícolas, evitando así el uso masivo de venenos y rodenticidas químicos que tanto perjudican a la fauna silvestre asociada a los cultivos. Esto y mucho más se cuenta y se puede ver en la visita al Lechuzar de GREFA, pero lo mejor es que cuando pase este periodo de confinamiento derivado de la actual lucha contra el coronavirus vengáis a conocer nuestro centro "Naturaleza Viva" en Majadahonda (Madrid) durante las visitas que organizamos los fines de semana para el público general y para grupos.

Carteles y caja nido para lechuza a la entrada del Lechuzar de GREFA.

Y para terminar...

Os proponemos un juego de agudeza visual: ¿Sabrías decirnos qué diferencia encontráis entre los pollos de lechuza (Foto A) y los de cernícalo (Foto B) y mochuelo (Foto C)?

A - Pollos de lechuza

B - Pollos de cernícalo vulgar

C - Pollos de mochuelo

Respuesta: Si os fijáis bien los pollos de lechuza tienen una diferencia muy grande entre unos y otros, en concreto entre el de mayor edad y el de menor edad. Mientras tanto, en pollos de cernícalo y mochuelo los hermanos son de la misma edad y, por lo tanto, de un tamaño similar. Ello es porque la lechuza comienza la incubación en el momento de la puesta del primer huevo mientras que las otras especies comienzan a incubar cuando han completado la puesta, por lo que todos los huevos nacerán más o menos en las mismas fechas.