El pasado 7 de septiembre recibimos el aviso de un amigo de GREFA. Había visto el cadáver de un águila imperial junto a la M-50. El equipo de rescate de GREFA acudió al lugar y encontró al águila donde nos habían dicho. Como es normal por donde se encontraba el animal pensamos que se trataba de un atropello.
Cuando el equipo veterinario realizo la necropsia nos encontramos con la tozuda realidad:. Esta joven águila imperial había muerto brutalmente tiroteada por un escopetero con más de 50 perdigones en su interior.
Este águila imperial ibérica, una especie en grave peligro de extinción y endémica de la península, destaca entre la gran cantidad de rapaces disparadas que ingresan en los centros de recuperación con la apertura de la temporada de caza.