Este proyecto se inició en el 2002 con la construcción del primer primillar en Villaviciosa de Odón. A partir de entonces, el proyecto se ha ido ampliando con la construcción de otros 6 más, distribuidos principalmente en municipios próximos a la capital y configurando así una red de primillares. Esto implica una interconexión y reforzamiento demográficos mediante la liberación de pollos de cernícalo primilla (Falco naunamii) criados en cautividad en las instalaciones de GREFA. La existencia de una red de colonias ofrece una mayor capacidad de respuesta ante sucesos imprevisibles, como por ejemplo la destrucción del lugar de nidificación, al poder dispersarse los individuos a otros núcleos reproductores próximos.
El cernícalo primilla se encuentra actualmente catalogado como “en peligro de extinción” dentro de la Comunidad de Madrid, por lo que la construcción de primillares (junto con las reintroducciones) son una solución bastante adecuada para la crítica situación en que se halla la especie: tales instalaciones constituyen un enclave óptimo de nidificación, enclavados en áreas protegidas legalmente y evaluadas como idóneas para su alimentación, lo que garantiza el éxito de las poblaciones de la especie a largo plazo y el asentamiento paulatino de parejas silvestres en las colonias.
De los 7 primillares construidos hasta el momento, dos se encuentran en el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama y su Entorno: Villaviciosa de Odón (2002) y Monte de Batres (2007). Otros dos, Perales del Río (2005) y Pinto (2008) fueron realizados en el Parque Regional de los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama. El de Navas del Rey (2008) se construyó en la ZEPA de los encinares de las cuencas de los ríos Alberche y Cofio. El de Quer (2008), en la ZEPA número 139 de las estepas cerealistas de las cuencas de los ríos Jarama y Henares. Y el último, el de Quijorna (2009), se encuentra también en la ZEPA de los encinares de las cuencas de los ríos Alberche y Cofio
Las actividades que se han venido realizando en los primillares, además de las reintroducciones, han consistido en el seguimiento reproductivo de las colonias mediante el control de los individuos retornados (identificados mediante lectura de anillas), el monitoreo de las parejas formadas en la colonia y de sus puestas y, por último, el anillamiento de los pollos nacidos en el primillar. Todas estas tareas se han visto acompañadas de estudios de selección del hábitat de alimentación y de permanencia en la colonia de los ejemplares retornados, tanto silvestres como reintroducidos. Para asegurar la viabilidad del proyecto, se ha contado con la colaboración de los ayuntamientos, implicando a diversos colectivos sociales y realizando campañas de sensibilización en colegios.
Desde el 2002, se han reintroducido un total de 626 pollos, habiendo nacido en los primillares 284 ejemplares. De todos estos han volado 886, es decir, un 98´11%. Sin considerar los pollos de 2009, han retornado a la región el 15,86% del total, principalmente en los primillares de Perales del Río, Villaviciosa de Odón y Monte de Batres. El máximo anual de retornos superó los 50 ejemplares el año pasado, observándose una alta reincidencia interanual de los retornos. Además 33 individuos han sido observados en primillares distintos durante estos años, señal de la conectividad existente entre éstos.
Hay que destacar la instalación de Perales del Río donde este año se alcanzó el máximo número de parejas reproductoras: 23. Este primillar es, actualmente, la tercera colonia más importante de la Comunidad de Madrid. En el caso de Pinto, la colonización por parte de individuos silvestres ha sido espectacular ya que, desde su puesta en marcha y en tan sólo un año, el número de reproductores ha pasado a ser de 7 parejas.
De las 310-309 parejas reproductoras censadas en 2009 en la Comunidad de Madrid, 41 parejas se encontraban en la Red de primillares, representando en torno al 13%. Los que presentan mayor número de parejas reproductoras, por orden de importancia, han sido Perales del Río con 23, Villaviciosa de Odón con 8, Pinto con 7 y Batres con 3. En el resto de primillares aún es pronto para obtener resultados, debido a que llevan poco tiempo en funcionamiento, pero es de esperar que en poco tiempo sean colonizados, tanto por los ejemplares reintroducidos como por los silvestres. A la vista de estos datos, podemos ser optimistas de cara a la dinámica poblacional de la especie en nuestra región.
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