Coincidiendo con la media veda, ingresan en GREFA aves protegidas víctimas de disparos

El equipo veterinario de GREFA trata a un aguilucho lagunero ingresado tras ser disparado.

Detalles: Publicado: 20 Septiembre 2022; Visto: 1308

Recientemente se ha dado por concluida la media veda. Coincidiendo con estos días de caza, hemos recibido en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA animales que han sido el objetivo de disparos de desaprensivos que, en muchos casos, atentan contra nuestra fauna protegida. Estas semanas atrás han ingresado en nuestro centro nueve aves tiroteadas, de las que solo tres pertenecen a una especie cinegética (paloma torcaz).

Haciendo un desglose de los seis animales que han ingresado por disparos en las últimas semanas y que no son especies cinegéticas, tenemos el caso de una tórtola turca (cuya caza está prohibida en la Comunidad de Madrid) traída por un particular hasta nuestro centro desde el municipio madrileño de Mejorada del Campo. Tuvo que ser eutanasiada a causa de las lesiones que presentaba (varias fracturas en ala derecha y una herida penetrante en abdomen).

En cuanto a tres búhos reales tiroteados, uno ingresó en GREFA tras ser alertado de su hallazgo por parte de la Policía Local de Aranjuez. Después de ser traído hasta nuestras instalaciones por el Equipo de Rescate de GREFA, este búho real fue sometido a una cirugía debido a que el disparo le había provocado una fractura de fémur. A pesar de nuestros esfuerzos por salvarle la vida, murió al día siguiente de la intervención a causa de las lesiones provocadas por los disparos. Con respecto a los otros dos búhos reales, ingresaron en nuestro hospital de fauna ya muertos y no pudimos hacer nada por ellos.

El aguilucho lagunero tiroteado parece evolucionar favorablemente de sus heridas.

Otras víctimas: aguilucho lagunero y halcón

Otra de las aves disparadas ha sido un aguilucho lagunero, que fue traído a GREFA por nuestro Equipo de Rescate tras ser avisados por un particular. En la actualidad se encuentra ingresado bajo tratamiento. Esta ave sufre una fractura de cúbito e ingresó muy delgada y deshidratada. A consecuencia del disparo presenta una herida que parece evolucionar favorablemente gracias a que nuestros veterinarios la están tratando con curas y antibióticos.

Más víctimas de disparos: un halcón peregrino llevado hasta nuestro centro por los Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid, en la actualidad se encuentra también bajo tratamiento. La rapaz, delgada, deshidratada y con una fractura múltiple de cúbito derecho, tenía alojado un perdigón en la articulación del codo. Aunque hemos logrado recuperar la condición corporal y el estado de hidratación de este halcón, las lesiones que presenta hacen que sea muy difícil que recupere la función completa del ala dañada y, por lo tanto, se ve comprometida su liberación en el medio natural. Casualmente, este halcón peregrino fue encontrado en Villanueva del Pardillo (Madrid), en una zona cercana al lugar donde recogimos hace dos años otro halcón disparado y que permanece aún en nuestras instalaciones en recuperación.

Halcón peregrino víctima de disparo que ingresó recientemente en el hospital de fauna de GREFA.

El grave problema del plomo en el campo

Estas fechas son también el momento del año en el recibimos buitres leonados jóvenes que presentan niveles altos de plomo y este año no ha sido una excepción. Creemos que el posible origen de este plomo podría estar en los animales disparados en el campo por cazadores y que son carroñeados por aves necrófagas como los buitres, ingiriendo así el plomo de los perdigones.

Radiografía de uno de los tres búhos reales tiroteados, en la que se aprecia la gran cantidad de perdigones alojados en su cuerpo.