El Buitre leonado ha comenzado a “despegar” demográficamente en el Parque Natural de Nebrodi (Sicilia): con 8 parejas nidificantes y 7 pollos volados en el año 2007.

Ello supone que se ha formado ya un núcleo reproductor permanente, que conoce y explota un área de campeo cada vez mayor en torno al área de cría (Rocca Dragú, en el término de Alcara li Fusi) y que hay un número significativo de pollos agregándose cada año a la población.  Sería en este sentido muy interesante contar con datos de los movimientos de estos jóvenes volantones, ya sea a través de radiotransmisores o marcas alares y, como mínimo, efectuar su marcaje con anillas de lectura a distancia a fin de contabilizar el número total y composición del núcleo reproductor para supervisar la dinámica demográfica a medio y largo plazo

Lo cierto es que, tras una serie de vaivenes burocráticos que hicieron temer por la continuidad del proyecto (en el plazo de un año, el cargo de máxima responsabilidad del Parque recayó en tres personas distintas), se han comenzado de nuevo a soltar los ejemplares que permanecían desde finales del 2006 en el recinto de aclimatación (4 en la primera semana de febrero, casi al tiempo de redactar estas líneas). Dado que aún restan una veintena de individuos en la instalación aptos para ser liberados durante el año 2008, y que para entonces la población reinsertada supere los 60 individuos (mínima población viable) y se haya conseguido así el principal objetivo del proyecto: crear un núcleo evolutivamente estable de Buitre leonado en Sicilia.

La presencia ecológica de esta rapaz en el sur de Italia contribuirá al desarrollo de la red europea de corredores para necrófagas (“Buitres sin Fronteras”), proyecto de largo alcance en el que lleva GREFA embarcada  ya varios años.

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