Las plagas de topillo campesino son una problemática muy arraigada en los entornos agrícolas castellanoleoneses desde hace ya varias décadas. Estas explosiones demográficas producen importantes daños a la agricultura. La elevada intensificación del terreno, la degradación de los ecosistemas, la expansión del regadío, y la proliferación de cultivos plurianuales como la alfalfa, son algunas de las razones que han propiciado la progresiva expansión y colonización de toda la Meseta Norte por parte de este roedor. De forma tradicional, las plagas han sido combatidas con rodenticidas anticoagulantes como la bromadiolona, ocasionando importantes eventos de mortalidad a numerosas especies cinegéticas y protegidas de los entornos esteparios.
El pasado 7 de Diciembre, el suplemento semanal Mundo Agrario del diario “El Mundo” plasmó en sus páginas la labor que GREFA realiza en materia agrícola a través de nuestro proyecto de Control Biológico de Plagas de Topillo campesino.
Como bien sabéis, estas última semanas estamos moviendo por toda Castilla y León nuestra exposición itinerante sobre control biológico de plagas de topillo. Esta muestras es fruto de un programa educativo que pretende llegar a la población rural, especialmente a agricultores, cazadores y sus familias.
El pasado día 28 de noviembre, el equipo de nuestro proyecto de Control Biológico de Plagas de Topillo fue invitado a intervenir en las Jornadas de Buenas Prácticas Agrarias celebradas en el Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega (Segovia) por WWF España. En estas jornadas participó también la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León.
Hace varios años, GREFA estableció un vínculo con el municipio de El Oso (Ávila), en la comarca de la Moraña. En concreto, comenzamos a colaborar en el control biológico de plagas de topillo, con el apoyo de la Fundación Biodiversidad. Es una pequeña muestra de la implicación con el desarrollo rural sostenible de esta localidad, que ha apostado fuerte por el fomento del turismo ornitológico responsable. Ejemplo de ello ha sido la construcción de observatorios de aves en sus lagunas, donde invernan cientos de grullas y gansos, así como la edición de material divulgativo y la reciente construcción del centro de interpretación “Las Laguna de la Moraña”.